Los 4 principios de la accesibilidad web
De acuerdo con la Iniciativa de Accesibilidad Web del Consorcio WWW, estos son los principios a tener en cuenta:
1. Perceptibilidad
Este principio hace referencia a que el contenido web sea perceptible para la mayoría de los usuarios. Así, presenta alternativas auditivas al contenido en imágenes (como es el caso del texto alternativo, que es legible por medio de programas de voz para personas con alguna discapacidad visual), así como etiquetas para botones y otros componentes visuales.
También, es posible añadir versiones en audio de los contenidos en texto y el uso de iconos también ayuda a entender las funciones de un sitio web o aplicación.
2. Operabilidad
La operabilidad indica que los usuarios pueden operar o manejar la experiencia digital a su gusto. Por ello, cada vez son menos usuales los avances automáticos en un blog o el pase automático de diapositivas en una presentación. La idea es que el usuario decida cuánto tiempo invertirá en cada contenido.
Por ejemplo, una persona con dislexia o debilidad visual podrá pasar tanto tiempo como necesite para comprender un texto. Aquí, también implica que podrá hacer zoom o integrar la plataforma o app con herramientas enfocadas en sus necesidades.
En estos casos, la usabilidad también implica que el contenido no cuente con destellos u otro tipo de animaciones que resulten agresivas para con lesiones cerebrales, enfermedad de Alzheimer, epilepsia u otras condiciones neurológicas.
3. Comprensión
Este elemento es importante para todos los usuarios: el texto debe ser legible y claro. En general, los contenidos deben tener una disposición y estructura que resulten intuitivas para las personas que comparten un idioma y cultura.
En el caso de los grupos de usuarios con alguna discapacidad intelectual o de aprendizaje, es útil evitar tecnicismos, añadir diccionarios y brindar esquemas o guías visuales que condensen la información.
4. Robustez
Este principio indica que los productos virtuales deben funcionar en distintos tipos de dispositivos y navegadores, así como ser compatibles con las herramientas de apoyo de los usuarios. ¿Cuántas veces te has topado con sitios web que no funcionan en ciertos navegadores al 100 %? Esto resulta incluso más frustrante para las personas que requieren usar cierto software adicional y que, a menudo, se encuentran con funciones limitadas en los sitios web, plataformas y aplicaciones.
Por ello, busca que tus activos digitales sean adaptables, que las funciones estén íntegramente disponibles en distintos dispositivos y navegadores, y que sean compatibles con los programas de accesibilidad más populares (como Voice Access, Google Talkback, TapTapSee, entre otros).
¿Cómo hacer que un sitio web sea accesible?
Ahora que ya conoces qué es la accesibilidad web y su relevancia es posible que te hayas dado cuenta de que tu sitio no cumple con ninguna o con muy pocas de las cualidades para ser accesible.
Para comenzar a brindar una accesibilidad web debes tomar en cuenta las siguientes opciones:
1. Alternativas de texto
Todos los elementos que no sean texto dentro de tu sitio web (como imágenes, video y contenido de audio) deben tener un atributo de texto que describa su contenido para que las personas con discapacidades visuales puedan entenderlos (deben estar debidamente etiquetados en las metadescripciones).
Para el contenido decorativo también es necesario incluir un texto alternativo para hacer referencia de que existe.
2. Formas alternativas de consumir medios basados en el tiempo
Los medios basados en el tiempo se refieren a contenido de audio y video. Para hacer más accesible el contenido de audio, puedes incluir una transcripción completa de la grabación; para el contenido de video puedes usar subtítulos.
3. Contenido fácil de ver y escuchar
Si deseas que tu contenido sea más accesible para personas con discapacidades visuales modifica el contraste y color para que cada usuario pueda ajustarlos en su navegador según lo que les resulte más fácil de leer.
En el caso de las discapacidades auditivas, debes incluir controles de volumen adaptables, añadir instrucciones y comentarios en lengua de signos y evitar timbres, alarmas de error o sugerencias de sonido.